Una vista de la Confitería Ñu Pora

Todo empezó camino al cielo.

Último sábado... ya pasado el mediodía y con las vacaciones estivales a la vuelta de la esquina, decidimos ir hacia nuestro refugio, "Cabaña El Cielo", por la avenida San Martín o la ruta intermunicipal y de paso conocer la Confitería Ñu Porá en Río Ceballos.

Vistas desde la pileta, del cerro y las luces de la confitería Ñu Porá.

Luego de recorrer el camino ascendente tanto hacia el Cristo de Ñu Pora como hacia la confitería —ambos ubicados frente a frente—, ingresamos a la cochera. ¡Un punto a favor! Allí pudimos estacionar sin costo alguno y sin la necesidad de un cuidacoches.

Almorzando desde el Cerro Ñu Pora.

Al entrar, nos encontramos con un amplio patio lleno de mesas. Unos pasos más adelante, a nuestra derecha, se encontraba el salón: inmenso y muy limpio.

Siguiendo la recomendación de la mesera, pedí un "lomo Criollo", para mi esposa y yo. Sándwich que venía acompañado de una generosa porción de papas fritas (¡deliciosas y crujientes!). Completé nuestro almuerzo con una cerveza de medio litro y una Coca-Cola Zero.

Mientras disfrutábamos de la comida, y de la maravillosa vista del nuevo Río Ceballos. Nos divertimos buscando la "Cabaña El Cielo".

Los precios nos parecieron accesibles según la carta que nos ofrecieron. La atención fue muy delicada y se preocuparon por nuestra comodidad. En resumen, un lugar que recomendamos conocer a los turistas. Con dos atracciones tan importantes una frente a la otra —como ya mencioné en mi publicación anterior sobre el Cristo de Ñu Porá—, la zona tiene mucho potencial.

El que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.

Sigo insistiendo... La Municipalidad de Río Ceballos debería mejorar el acceso a esta zona y, especialmente, al parque que rodea al increíble monumento del Cristo donde, además de orar, se puede aprender y tomar unos ricos mates acompañados de amigos.

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